El tratamiento para la displasia de cadera del adulto joven dependerá según la manera en que el síntoma interfiere en su calidad de vida. Es decir, en pacientes asintomáticos se recomienda hacer controles radiológicos anuales y, de acuerdo a los resultados obtenidos, se evaluarán las alternativas terapéuticas.

En aquellos casos en que las personas manifiestan síntomas, el profesional médico indicará realizar controles radiológicos periódicos y hacer ejercicios de rehabilitación y fortalecimiento muscular.

En los pacientes con dolores más severos se puede llegar a realizar una intervención quirúrgica con el fin de reorientar el acetábulo para lograr una mayor cobertura de la cabeza femoral.

Pinzamiento Femoroacetabular

Este síndrome surge cuando el cuello y la cabeza femoral contactan de manera anormal con la cavidad del acetábulo, predisponiendo a lesiones del lábrum y del cartílago articular. Afecta a la articulación de la cadera en adultos jóvenes y de mediana edad. Y se la considera como la causa más frecuente de artrosis de cadera.

Clínicamente se presenta con dolor inguinal, que aumenta con la flexión y rotación interna de la cadera. También puede manifestarse por medio de una limitación en los movimientos de la articulación o crujidos audibles dolorosos.

El diagnóstico es clínico y mediante estudio de imágenes como radiografías y resonancia de la cadera. A partir de los resultados obtenidos se le indicará cuál es el tratamiento más adecuado. Las opciones terapéuticas varían desde analgésicos y ejercicios de rehabilitación hasta tratamiento quirúrgico mediante artroscopía de cadera, dependiendo del tiempo de evolución y de las lesiones de cada paciente.

Pero, ¿dónde duele la cadera? El dolor articular de la cadera se presenta en la región inguinal, pudiéndose irradiar hacia el glúteo formando una “C” que pasa por el trocánter mayor.


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¿Cómo cuido mi cadera?

Hay una serie de hábitos saludables que nos permiten cuidar la cadera previniendo así la aparición de síntomas:

Actividad física. Se recomienda evitar ejercicios forzados de flexión y rotación interna. Los deportes acuáticos o bicicleta son ideales ya que disminuyen la carga de la articulación. También se aconseja mantener una buena masa muscular y elongar el músculo psoas (músculo que se encuentra entre la cavidad abdominal y la parte anterior al muslo).

Mantener un peso saludable. Con un peso adecuado la cadera trabaja con cargas menores manteniendo así mejor su movilidad con menor esfuerzo. De lo contrario, afecta a las articulaciones de carga, principalmente la cadera y la rodilla. Con un peso adecuado la cadera trabaja con cargas menores manteniendo así mejor su movilidad con menor esfuerzo.

Cuidar posturas y hábitos de trabajo/estudio. El sedentarismo lleva a soportar presiones excesivas durante mucho tiempo en la articulación. En el caso de pasar muchas horas diarias en una silla, es conveniente que sea alta, para evitar la flexión excesiva de cadera. Sentarse con los dos pies apoyados y sin cruzar las piernas. Asimismo, se recomienda cada tanto pararse y caminar unos pasos permitiendo la movilidad articular.

Para poder identificar correctamente la patología es necesario identificar el origen de las molestias (si el dolor es intenso, persistente y/o aumenta al moverte) a fin de indicar el tratamiento más adecuado para cada paciente. El Servicio de Traumatología y Ortopedia de Sanatorio Allende cuenta con la infraestructura y un equipo médico especializado para este tipo de patologías. ¡Consultar a tiempo ayuda a prevenir futuras complicaciones!.