Las dos lesiones más frecuentes en el hombro

El hombro está formado por huesos, músculos, ligamentos y tendones, constituyéndose como una de las articulaciones del cuerpo más susceptible de lesionarse durante la práctica deportiva. Entre las estructuras que se pueden dañar se encuentran: la clavícula, la articulación acromioclavicular, el acromion, el manguito rotador y la articulación glenohumeral. De hecho, una de las patologías más conocidas y vinculadas con el dolor de hombro se sitúa en la zona del famoso “manguito rotador”. Esta estructura está formada por un conjunto de músculos y tendones (supraespinoso, infraespinoso, subescapular y redondo menor) que rodean la articulación del hombro, permitiéndole tener movilidad y estabilidad.

Entre las patologias que pueden afectar el manguito rotador se pueden mencionar la inflamación (tendinitis) y la ruptura de los tendones (lesion manguito rotador).

Las lesiones del manguito rotador pueden originarse de varias maneras. Hacer una rutina de ejercicios mal realizada en cualquier deporte o un traumatismo son motivos que las predisponen. En el caso de los deportistas la frecuencia con que se lastiman depende de la edad y del nivel de competición. Durante el juego, su hombro se somete a fuerza y tensiones extremas, en especial en aquellas actividades que son repetitivas del tipo lanzamiento o que impliquen realizar un movimiento por encima de la cabeza (deportes como voley, natación, basquet, entre otros).

La tendinitis es una lesión que ocurre cuando los tendones del manguito rotador se inflaman. Pueden ser aguda (reversible y afecta a jóvenes luego de realizar un esfuerzo físico repetido) o  crónica (recurrente en el tiempo sin recuperarse del todo y afecta a personas adultas) son dos subtipos de esta lesión, la cual se manifiesta con dolor localizado sobre la cara anterior y lateral del hombro.

Por el contrario, cuando uno o más tendones que componen el manguito rotador se rompen total o parcialmente se habla de ruptura. Según cual sea el origen de esa lesion se puede clasificar en diferentes tipos. Por lo general, esta lesión se produce en pacientes mayores de 40 años y puede llegar a manifestarse de manera crónica.

Las personas más propensas a sufrir este tipo de lesión son las mayores a 50 años, debido al deterioro del tendón.

Los síntomas y signos que indican una lesión en el hombro son muy puntuales de la zona, entre los cuales se mencionan dolor sordo en lo profundo del hombro, alteración del sueño, dolencia nocturna, molestias al elevar el brazo y debilidad en el mismo.

La presencia de alguno de los síntomas deja ver la importancia de consultar con un médico especialista, quien realizará diferentes pruebas específicas para cada patología. En algunos casos, puede recomendar estudios de diagnóstico por imágenes como radiografías, ecografías y una resonancia magnética.

Frente a una lesión deportiva, el tratamiento dependerá del tipo y de la gravedad del traumatismo. Entre las cuales se pueden mencionar hacer reposo, aplicar hielo, administrar medicamentos (para aliviar el dolor), rehabilitación, ejercicio leve trás el período de reposo, eventual infiltración con fármaco y la cirugía. En el caso de esta última, la intervención quirúrgica, incluye la reparación artroscópica del tendón (a través de pequeñas incisiones se vuelve a unir el tendón al hueso), o bien, la reparación abierta del tendón (unir el tendón dañado al hueso a través de una incisión más grande permitiendo cicatrizar en el mismo período).

El Servicio de Traumatología y Ortopedia de Sanatorio Allende está formado por un equipo de profesionales que brindan una atención de calidad para el paciente lesionado. Asimismo, se sugiere no sólo una completa recuperación siguiendo las recomendaciones indicadas por el médico, sino también la toma de conciencia para la realización de deporte, utilizando las medidas de protección y el equipamiento adecuado.