Tsh alta: síntomas y causas

La glándula tiroides produce, almacena y libera hormonas que permiten regular todos los aspectos del metabolismo. Ubicada en la base del cuello, produce las hormonas T3 y T4, las cuales afectan a la mayoría de las células de nuestro organismo. Cuando esta glándula se enferma y no cumple su función correctamente se puede evidenciar determinados trastornos como el hipotiroidismo y el hipertiroidismo.

Este trastorno ocurre cuando existe poca producción de hormona tiroidea. Cuando la glándula tiene una actividad lenta impide producir la cantidad de hormonas que el cuerpo necesita para su correcto funcionamiento lo cual genera un enlentecimiento del metabolismo como principal síntoma. La baja producción de hormonas puede suceder por diferentes motivos: la presencia de anticuerpos antitiroideos (tiroiditis de Hashimoto), la falta de yodo, tras remover quirúrgicamente la tiroides, el consumo de determinados fármacos, entre otras causas.

El hipotiroidismo es más frecuente en mujeres que en hombres. La posibilidad de aparición de esta enfermedad aumenta con la edad. Asimismo, aquellas personas que tengan antecedentes familiares de enfermedad de tiroides presentan una mayor predisposición a padecerla. Entre los síntomas y signos que dan indicio a esta patología, se pueden mencionar que la persona tenga cansancio, sueño excesivo, aumento de la caída del cabello, uñas frágiles, intolerancia al frío, disminución del metabolismo con aumento de peso, estreñimiento, irregularidades menstruales, infertilidad, dolores musculares, cambios de ánimo, pérdida de memoria y dificultad para concentrarse.

El tratamiento se realiza sustituyendo la falta de producción hormonal propia con una hormona sintética cuya dosis se determina en relación al peso corporal del paciente. Es muy importante tener en cuenta la correcta toma de la medicación, la cual debe ser en ayunas y al menos 30 minutos antes de ingerir alimentos, para que la hormona se absorba adecuadamente.

Esta alteración hace referencia al funcionamiento excesivo de la glándula tiroidea la cual genera una mayor producción y secreción de hormonas. Esto puede deberse a un estímulo exagerado de la glándula tiroidea por parte de anticuerpos (Enfermedad de Graves), nódulo con funcionamiento autónomo, glándula de gran tamaño y con presencia de nódulos , fármacos que aumenten la síntesis de la hormona tiroidea, entre otras causas.

Al igual que el hipotiroidismo, este trastorno afecta con mayor frecuencia a las mujeres. Además, la incidencia de su aparición aumenta conforme a la edad y al consumo de determinadas sustancias como por ejemplo, el tabaco.

Debido a la excesiva producción de hormonas tiroideas, el paciente puede manifestar diferentes síntomas como palpitaciones, pérdida de peso a pesar de tener un gran aumento de apetito, temblor (principalmente en las manos), diarrea, insomnio e hipersudoración con mala tolerancia al calor. Las mujeres pueden presentar alteraciones o pérdida del ciclo menstrual. En el caso de los pacientes que padezcan la Enfermedad de Graves, puede existir compromiso ocular que se puede manifiestar con ojos rojos y dolorosos y, en ocasiones, saltones.

En caso de ser necesario también se hará una ecografía tiroidea. Es por eso que, a partir del diagnóstico y de su causa existen tres alternativas terapéuticas que el profesional médico decidirá en función de su origen: fármacos antitiroideos, terapia ablativa con yodo radioactivo y cirugía.

Lo recomendable es que ante la presencia de alguno de los síntomas mencionados se realice una consulta médica con un profesional especializado, quien solicitará los estudios necesarios para confirmar el diagnóstico y comenzar el tratamiento más adecuado.