El glaucoma es una de las principales causas de ceguera en personas mayores de 60 años, aunque puede presentarse a cualquier edad. Desde Sanatorio Allende te contamos sus principales causas y alternativas terapéuticas para su tratamiento.
El glaucoma es una afección ocular que se caracteriza por el daño del nervio óptico seguido de la pérdida visual progresiva.
La mayoría de los glaucomas no presentan signos de alerta. Las consecuencias que producen se presentan de forma gradual al punto que es posible que el paciente no perciba un cambio en la visión hasta que la afección se encuentre en una etapa avanzada.
Teniendo en cuenta que no es posible recuperar la visión al 100% una vez detectado el glaucoma, es fundamental realizar exámenes oculares periódicos que incluyan mediciones de la presión ocular para realizar un diagnóstico temprano y tratarlo de forma adecuada.
Si se detecta el glaucoma en una etapa inicial, la pérdida total de la visión puede retrasarse.
Las siguientes recomendaciones pueden ayudar al paciente a detectar el glaucoma en su etapa inicial, lo que es fundamental para disminuir la velocidad de avance o prevenir la pérdida de la visión.
El tratamiento del glaucoma puede implicar desde el uso de gotas oculares hasta una cirugía, dependiendo del estadio clínico de la enfermedad, la severidad del caso y la expectativa de vida del paciente.
Para conseguir la presión meta o el objetivo fijado pueden indicarse gotas oculares, ya sea a través de un único fármaco o utilizando hasta cuatro medicamentos como terapia médica máxima tolerada.
En casos de intolerancia a la medicación, en ciertos tipos de glaucomas puede utilizarse un tratamiento láser (Trabeculoplastia Láser Selectiva–SLT). Hoy es una terapia confiable por su nivel de seguridad y eficacia ya que elimina o disminuye la necesidad de gotas para controlar la presión sin producir efectos colaterales.
En los casos donde no es posible mantener estable la función y estructura del nervio óptico existen otras alternativas terapéuticas. La cirugía de cataratas con lente intraocular es una solución válida para determinados tipos de glaucoma.
Sin embargo, la técnica más utilizada para reducir la presión intraocular y mantener las funciones del nervio óptico es una intervención quirúrgica que mantiene el flujo de humor acuoso en un equilibrio permanente llamada “cirugía filtrante''.
La mayoría de los pacientes con glaucomas desconocen que padecen la afección. Por este motivo, es importante generar conciencia sobre el hábito de la consulta oftalmológica anual, especialmente a partir de los 40 años.
El éxito del tratamiento depende de un diagnóstico temprano y del cumplimiento del tratamiento y los controles indicados por el especialista.
marzo 28, 2024
marzo 20, 2024
febrero 26, 2024