Que el Herpes Zóster haya aumentado sus casos en el último tiempo no está relacionado a una mayor capacidad de contagio. El aumento de esta patología se relaciona al envejecimiento poblacional y un número creciente de inmunodeprimidos.
El Herpes Zóster, también conocido como “culebrilla”, está causado por la reactivación del virus varicela-zoster (VVZ), el mismo virus que causa la varicela. Una vez resuelta la varicela, el virus permanece inactivo y puede reactivarse más adelante en la vida de una persona.
La reaparición del virus puede causar una erupción vesicular maculopapular dolorosa (herpes zóster), que afecta el trayecto de un nervio (cara, cuello, tórax y lumbar). Estas vesículas se convierten en costras en 7 a 10 días y desaparecen en 2 a 4 semanas.
En Argentina, a fines de marzo de éste año, el ANMAT oficializó la disponibilidad de una nueva vacuna contra el Herpes Zóster. Ésta vacuna llamada Shingrix, debe ser aplicada en un intervalo que va entre dos y seis meses para los mayores de 50 años.
¿Qué características tiene la nueva vacuna contra el Herpes Zóster?
La principal propiedad de la vacuna Shingrix es que es una vacuna inactivada elaborada a partir de un componente del virus. Por ende, al no tener virus vivos, puede administrarse en inmunocomprometidos sin contraindicaciones y el haber tenido Herpes Zoster previamente no contraindica su colocación.
También puede administrarse con otras vacunas como la de la gripe, neumonía y hepatitis sin problemas.
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Algunas de las complicaciones que puede presentar ésta patología son: la Neuralgia Postherpética (NPH), Herpes Zóster oftálmico y Zóster diseminado[/caption]
Esta vacuna se administra en dos dosis, con un intervalo de 2 a 6 meses entre cada una de ellas. Los efectos secundarios más comunes de la vacuna contra el Herpes Zóster son:
- Enrojecimiento
- Dolor general
- Sensibilidad, hinchazón y picazón en el sitio de la inyección
- Dolores de cabeza
Si bien la eficacia para la prevención del Herpes Zóster en los estudios clínicos es mayor al 90%, las personas contraen la enfermedad a pesar de la vacunación, tienen disminución de la severidad y duración. La vacuna además disminuye el riesgo de neuralgia posherpética, complicación más frecuente y muchas veces invalidante del Herpes Zóster. La Neuralgia posherpética se caracteriza por dolor que dura mucho tiempo luego de resuelto el HZ.
Es importante que los pacientes adultos mayores de 50 años, tengan sus esquemas de vacunación completa, para gripe, covid, hepatitis B, tétanos. A estos esquemas se les agrega actualmente la Vacuna del Herpes Zoster.
En ese sentido desde el Servicio de Infectología de Sanatorio Allende distintos especialistas recomiendan que los adultos tengan actualizadas sus vacunas ya que son, junto a pacientes inmunocomprometidos, uno de los grupos de mayor riesgo de contraer esta enfermedad.
Doctor Fernando Riera - Servicio de Infectología - Sanatorio Allende
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