Alimentación recomendada en Hipotiroidismo e hipertiroidismo

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La tiroides o glándula tiroidea es el órgano encargado de producir una serie de hormonas que actúan en la función de diferentes tejidos y órganos del organismo. La misma es estimulada por una hormona producida por el cerebro la cual se denomina Hormona Estimuladora de la Tiroides (TSH). Una vez que la tiroides es estimulada, ésta se encarga de producir dos hormonas:

• Tiroxina (T4)
• Triyodotironina (T3)

 

Ambas hormonas participan en una gran variedad de funciones del cuerpo, como en el metabolismo de las grasas y los carbohidratos, la regulación de la temperatura corporal y la frecuencia cardíaca. Cuando disminuyen los niveles de las hormonas tiroideas en sangre, se desarrolla hipotiroidismo, y cuando aumentan hipertiroidismo.

Para acompañar desde la alimentación estos diagnósticos se recomienda llevar una alimentación variada acorde a las necesidades nutricionales que presente cada persona con el fin de mantener una buena calidad de vida.

¿Cómo es la alimentación recomendada en pacientes con Hipotiroidismo?

La absorción de la levotiroxina puede verse afectada fácilmente por determinados factores tales como la presencia de alimentos en el estómago y el consumo de alimentos ricos en fibra durante el desayuno. Por este motivo, se recomienda consumir la dosis indicada a primera hora de la mañana y en ayunas. Para evitar posibles interacciones con la medicación, es aconsejable:

• Consumir alimentos hasta media hora después de tomar la dosis diaria de Levotiroxina.
• Evitar ingerir en el desayuno alimentos ricos en fibra (cereales integrales, verduras, frutas, legumbres y semillas).
• Esperar 2 hs para incorporar frutas y así completar un desayuno equilibrado.

 

Si bien cada dieta en pacientes con hipotiroidismo requiere que esté adaptada a las elecciones, preferencias y estilo de vida de la persona, es importante:

• Incorporar variedad de grupos de alimentos (principalmente legumbres, cereales integrales, frutas, verduras, frutos secos, carnes magras y lácteos).
• Tomar agua de forma frecuente (8 vasos por día).
• Realizar las 4 comidas principales (desayuno, almuerzo, merienda y cena).
• Aumentar el consumo de alimentos ricos en Yodo (sal yodada, lácteos, pescados y mariscos)

 

Los alimentos ricos en yodo pueden contribuir en la producción de tiroxina. Foto: Depositphotos

¿Qué alimentos consumir cuando el diagnóstico es Hipertiroidismo?

En el hipertiroidismo se produce un incremento y alteración en el metabolismo de los carbohidratos, proteínas y grasas, lo que genera, en la mayoría de los casos, un marcado descenso de peso.

La alimentación en estos pacientes será balanceada y acorde a las necesidades nutricionales dependiendo del estado nutricional previo de cada persona. Si la persona presenta desnutrición tendrá una alimentación hipercalórica (como en la mayoría de los casos) y si presenta sobrepeso u obesidad, se darán recomendaciones alimentarias para llevar adelante una dieta hipocalórica.

Recomendaciones generales para realizar una dieta Hipercalórica

• Fraccionar la alimentación, realizando ingestas de volúmenes pequeños cada 3 hs. para lograr 6 comidas diarias.
• Incluir en cada una de las comidas, alimentos ricos en proteínas (lácteos, huevos y carnes) para enriquecer las preparaciones y lograr un buen aporte de nutrientes.
• Disponer de alimentos de consumo rápido para comer entre horas: frutos secos/ frutas desecadas, yogur o postres lácteos, galletas o bizcochuelos caseros.
• Masticar muy bien los alimentos para facilitar la digestión.
• Tomar de 2 a 2.5 litros de líquido diariamente que estén alejados de las comidas principales.
• Evitar el consumo de infusiones, sopas, caldos o bebidas antes de cada comida principal con la intención de no producir sensación de saciedad.
• Mantener una vida activa y en movimiento de acuerdo con las posibilidades individuales, consultando al médico de cabecera sobre recomendaciones específicas.

 

Recomendaciones generales para realizar una dieta Hipocalórica

• Evitar el consumo de alimentos con alta densidad calórica y bajo aporte de nutrientes (ultra procesados, ricos en azúcares, entre otros).
• Consumir una mayor cantidad de alimentos bajos en calorías y que aportan saciedad a largo plazo (como frutas o verduras).
• Optar por cocinar los alimentos al vapor, a la plancha o al horno, evitando las frituras.
• Respetar las cuatro comidas diarias y sus horarios.

 

En ambos diagnósticos se aconseja que las pautas alimentarias estén supervisadas y controladas por especialistas que puedan acompañar a la persona y elaborar un plan alimentario acorde a sus necesidades nutricionales y estilo de vida.

Servicio de Nutrición

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